06/04/2017 | |

Más capacidad, menos mercado

La demanda de cosechadoras crece en cantidad de pies de corte, pero reduce la cantidad de unidades. Una tendencia mundial.

Por Alejandro Rollán

La torta parece reducir sus porciones, que a su vez tienden a ser más grandes. Hasta hace unos años, el mercado nacional de cosechadoras requería de una tasa promedio de renovación anual de 1.200 unidades.

Sin embargo, la fuerte presencia de los proveedores en el segmento de las clases 6 y 7 refleja un cambio en las proporciones de la demanda.

A tal punto que ya el tamaño del mercado no se analiza por cantidad de unidades vendidas, sino por la cantidad de pies de corte que salen de las líneas de producción.

Hoy ya los contratistas rurales, principales usuarios de cosechadoras, prefieren tener menos máquinas, pero con más capacidad.

Esta tendencia explica por qué se van diluyendo de la oferta las preferencias por unidades de entre 23 a 25 pies de corte.

En el sector fabricantes aseguran que, para una producción agrícola de 120 millones de toneladas, la demanda de cosechadoras debería rondar entre 900 y 1.000 unidades por año.

De comprobarse este vaticinio, las 2.400 cosechadoras vendidas en 2004 serán parte de la historia.

Corto plazo

El tablero muestra algunas luces amarillas

Más allá del buen momento que atraviesa la industria de la maquinaria agrícola, desde la cámara que agrupa al sector observan algunas alarmas que habría que desactivar.

Fundado en el saneamiento económico que exhibe la demanda (productores y en especial contratistas rurales), y en las opciones financieras que ofrece el mercado (tanto en pesos como en dólares), los fabricantes de cosechadoras ya dimensionan el mercado para 2017, que anticipan como más robusto que el año pasado.

Dentro de las fábricas vinculadas a la Asociación de Fábricas Argentina de Tractores y otros equipamientos agrícolas (AFAT), la comercialización esperada para el presente año es de alrededor de 1.000 unidades.

A eso habría que sumarle otras 150 a 180 unidades que podrían colocar las fábricas que no pertenecen a la entidad que agrupa a las empresas multinacionales.

La mayor porción de las ventas seguirá concentrada, como en los últimos años, en las clases 6 (entre 268 y 322 HP) y 7 (323 a 374 HP).

En el caso de los tractores, las 6.500 unidades que proyectan colocar las empresas agrupadas en AFAT también tendrán como denominador común a un aumento en la potencia demandada. El segmento por encima de los 200 HP seguirá ganando adeptos.

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